Rodolfo Sáenz
Rodolfo Sáenz es un maestro costarricense de la construcción natural que lleva más de 40 años estudiando y enseñando la construcción con bambú en Europa y Costa Rica. Es conocido por su experiencia en la construcción con bambú y arcilla y ha impartido talleres y cursos sobre el tema en Europa y principalmente en Costa Rica.
Sáenz es el fundador de la Escuela de Bambú de Costa Rica (bambooschoolcostarica.com), una organización dedicada a enseñar a construir estructuras sostenibles y duraderas con bambú y otros materiales naturales. La escuela ofrece diversos talleres y cursos, incluido un programa de aprendizaje de construcción natural con bambú y arcilla.
Sáenz es un apasionado defensor de la construcción natural sostenible. Cree que construir con materiales naturales es una forma importante de reducir nuestra huella de carbono y proteger el medio ambiente. También cree que la construcción natural puede ser una forma eficaz de ayudar a las comunidades a ser más autosuficientes y resistentes.
Además de su trabajo en Bamboo School Costa Rica, Sáenz está ahora centrado en FincaRenacer.Org, donde enseña estas técnicas a través de Bamboo School Costa Rica y también tiene un programa de aprendizaje, alojamiento ecológico y algunos otros proyectos.
Es conocido por su habilidad para trabajar el bambú. Ha desarrollado técnicas innovadoras para trabajar este material sostenible y duradero. También ha diseñado herramientas especializadas para trabajar el bambú, como cuchillos, sierras, hachas y cinceles hechos a mano.
Ubicación de la escuela
Costa Rica es reconocida internacionalmente como un destino sostenible, comprometido con la protección del clima y el medio ambiente. Es un lugar ideal para conectarse con la naturaleza y ofrece experiencias únicas. Una de esas experiencias es aprender a construir con materiales naturales como el bambú y la arcilla.
Los cursos se llevarán a cabo en Finca Renacer (www.fincarenacer.org) en La Florida, cerca de Tinamastes en Costa Rica. La Florida es un pequeño pueblo situado a una altitud de 700 metros en las Montañas de Uvita. Está rodeado por cataratas, bosques protegidos y diversidad de vida salvaje que incluye muchas especies de plantas y animales. El aire es fresco y el agua es limpia y proviene de manatiales.